En raras ocasiones, se han observado:
- Reacciones alérgicas locales (prurito, eritema, pérdida del pelo) que afectan al cuello o la piel en general, lo que podría indicar una reacción local o general de hipersensibilidad.
- Síntomas gastrointestinales como vómitos, diarrea e hipersalivación.
- Problemas neuromusculares tales como ataxia y temblores musculares.
También se ha notificado en raras ocasiones alteración en el comportamiento (por ejemplo, letargo o hiperactividad), a menudo asociado con la irritación de la piel. Los síntomas generalmente desaparecen a las 48 horas después de que se haya retirado el collar. El tratamiento debe ser sintomático ya que no se conoce ningún antídoto específico. La frecuencia de las reacciones adversas se debe clasificar conforme a los siguientes grupos:
Muy frecuentemente (más de 1 animal por cada 10 animales tratados presenta reacciones adversas).
Frecuentemente (más de 1 pero menos de 10 animales por cada 100 animales tratados).
Infrecuentemente (más de 1 pero menos de 10 animales por cada 1.000 animales tratados).
En raras ocasiones (más de 1 pero menos de 10 animales por cada 10.000 animales tratados).
En muy raras ocasiones (menos de 1 animal por cada 10.000 animales tratados, incluyendo casos aislados).